martes, 12 de julio de 2011

Llueve en la selva

Llueve en la selva, el ruido silenció a las chicharras.
Más tarde serán las ranas que me hacen recordar;
las que aparecen cantando sin preámbulos, a veces de madrugada,
poco antes de que los Tomases comiencen a ladrar.
A los perros siempre les emociona el amanecer.
¡Shhh ya llegaron las ranas!
La luna no me importa hoy, la oscuridad por mi ventana lo llena todo
y me gusta porque me deja pensar, en el poema que escribes por ejemplo.
En los cordeles de colores que utilizaremos en el árbol.
También pienso en tu voz, en lo que decías antes y en lo que dices ahora;
se parece, pero ahora que hablas menos entiendo más.
Eso mismo pasa en las grandes ausencias, en las inmensas.
Cuando se hace el silencio lo entendemos todo.


¡A M A R T E !

No hay comentarios:

Publicar un comentario